Poco más de las cinco y media de la tarde, se ha producido un despliegue policial de gran relevancia a la altura de la Plaza de la Marina.
Los paseantes pensaron que se trataría de un accidente ante tal despliegue pero lo que de verdad había pasado es que un conductor había cruzado su vehículo para increpar a otros conductores y a los agentes policiales. La situación resultaba llamativa ante los gritos del joven y hasta el lugar se personaron tres patrullas de la Policía Nacional y una de la Policía Local a fin de calmar al exhaltado conductor.
Finalmente, la Policía decidió no tramitar ningún tipo de denuncia y el suceso no fue más allá.