La formación política presentó un contencioso frente a la celebración de este espectáculo en noviembre de 2023, consiguiendo una sentencia que calificaron de "histórica" para el movimiento animalista y que declara ilegal el acuerdo que permitió su celebración ese mismo año.
Los animalistas reclamaron al Gobierno regional su eliminación porque esa práctica está prohibida por la normativa, sin recibir respuesta.
Los servicios veterinarios de la Junta se han hecho cargo del animal esta mañana.
La formación animalista afirma que el control de la Junta de Castilla y León sobre la actividad de la caza es deficiente.