El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible sostiene que la compañía irlandesa está intentando “chantajear” al Estado.
Además hay otros 20 trabajadores más que están siendo investigados.
Esta pareja belga acudió al aeropuerto con los billetes reservados para ellos, pero se negaban a sacar el del pequeño.
Ryanair sería su principal apuesta.