El Plan Técnico de Caza 2022-2023 contempla la captura de 50 ciervos macho, de los que 10 serán tipo A1; 10, A2 y 30, B/C, así como 25 ciervas y 12 corzos, además de conceder, como novedad, 20 permisos de caza de jabalí en espera en la Reserva Regional de Caza ‘Sierra de la Culebra’ (Zamora), según informó hoy su Junta Consultiva.
Igualmente, prevé un control poblacional sobre otros 10 ciervos machos selectivos y 35 ciervas para prevenir daños en cultivos y siniestralidad en carreteras por atropello de fauna cinegética y contempla ejecutar varias mejoras específicas para la caza mayor y menorque incrementen el potencial del hábitat para albergar poblaciones cinegéticas y las expectativas de los cazadores locales de la Reserva, según informaron fuentes de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora.
Para la última temporada “se ha visto truncada de manera drástica” la tendencia creciente en los ingresos de los últimos años, al no haberse podido llevar a cabo ninguno de los permisos de caza de lobo, debido al cambio del estatus legal del lobo al norte del río Duero, en virtud de la Orden ministerial aprobada en septiembre de 2021 que incluía a esta especie en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial.
Por otra parte, la Junta Consultiva conoció la tramitación de los expedientes de indemnización de los daños producidos en la Reserva por la fauna cinegética durante 2020, con un total de 213 expedientes, de los que 160 fueron de daños agrícolas; 47, ganaderos y 6, de daños a infraestructuras agroganaderas, y un importe total pagado superior a los 130.000 euros.
En este contexto, la Junta informó de que más del 70 por ciento de los daños agrícolas y 29 de los 32 expedientes de daños ganaderos están ya tramitados y pagados. “Desde 2018, se han multiplicado los daños provocados por el lobo a explotaciones ganaderas en terrenos de la Reserva, sobre todo en la cabaña ganadera de vacuno. Los ataques han pasado de una media de 18 expedientes en el período 2011-2017, a 47 en 2020 y 32 en 2021”, detallaron las mismas fuentes.
Por lo que se refiere al número total de cabezas de ganado muertas, pasó de una media de 20 entre 2011 y 2017 a 51 en 2020 y 38 en 2021. Ello supuso que se triplique el importe de las indemnizaciones por daños de lobo en la Reserva, pasando de una media de 9.000 euros para el periodo 2011-2017, a 38.455 euros en 2020 y 26.395, en 2021.
La Junta Consultiva de la Reserva Regional de Caza ‘Sierra de la Culebra’, presidida en Villardeciervos por la delegada territorial, Clara San Damián, dio cuenta también de la renovación de vocales para los próximos cuatro años, como representantes de ayuntamientos, los alcaldes de Ferreras de Abajo, Ferreras de Arriba, Villardeciervos y Otero de Bodas.
Vocales
Por su parte, como vocales que representan a los propietarios de los terrenos situados en la Reserva son los de la Junta Rectora de Montes Vecinales en Mano Común de Cional, el de la asociación de propietarios del Monte Trasierro de Codesal, y el de la asociación de propietarios de Montes Vecinales de Sandín. El vocal que representará a las sociedades de cazadores locales será Agustín Sánchez, presidente del club Deportivo-Asociación de Cazadores de Puebla de Sanabria, y Tomás Yanes en calidad de representante de Waves, y Antonio de José Prada, como representante de Azadecap.
Los ingresos derivados de los aprovechamientos cinegéticos de la temporada 2021-2022 fueron de 122.446 euros, repartidos entre las entidades propietarias privadas y públicas, concretamente, una docena de ayuntamientos y las juntas administrativas de Villanueva de Valrojo y Litos.
La Junta Consultiva aprobó la propuesta del Plan de Actuaciones para 2022, que englobará, además de actuaciones de mejora del hábitat como desbroces, siembras para la caza, adecuación de charcas y puntos de agua naturales, construcción de refugios para caza menor, la dotación y mejora de la infraestructura orientada al uso público de la Reserva, el acondicionamiento y mantenimiento de infraestructuras y la renovación de material óptico necesario para los censos y seguimiento de fauna y de las acciones cinegéticas.